Juan Lobato, secretario general del PSOE de Madrid ha anunciado su dimisión. Esta decisión la tomó después de que el diario ABC publicase que había acudido a un notario para dar cuenta de las instrucciones que recibió por WhatsApp para informar en al Asamblea de Madrid sobre el caso del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Según el ya exsecretario general ha decidido renunciar «para poner freno a una situación de enfrentamiento y división grave que se estaba generando en el partido, que sólo iba a dañar al PSOE en Madrid y a los avances en la unidad que habíamos conseguido en estos tres años».
Además Juan Lobato ha manifestado que no cree en «la destrucción del adversario, en la aniquilación del que discrepa y del que piensa diferente». También ha afirmado que «sin duda mi forma de hacer política no es igual ni quizá en ocasiones compatible con la que una mayoría de la dirigencia actual de mi partido tiene» criticando abiertamente a la forma de actuar de Pedro Sánchez y su partidarios más cercanos.
La dimisión se produce después de que hubiera una gran presión significativa desde Ferraz para que Lobato dimitiera. Entienden que su decisión de registrar la conversación de WhatsApp en un notario lo cual fue una falta de confianza hacia el partido.
La dimisión de Lobato abre el camino para nuevas elecciones internas o el nombramiento de un sucesor, con Óscar López siendo uno de los nombres mencionados como potencial candidato.
Aunque ha dimitido de su cargo como secretario general, ha expresado que continuará como militante del PSOE, manteniendo su compromiso con el partido pero alejándose del liderazgo directo.