“Sois la imagen de España alrededor del mundo”. Con estas palabras llenas de orgullo ha despedido el general jefe del Mando Aéreo de Combate, teniente general Francisco González-Espresati, a la agrupación que este miércoles 26 de junio se incorpora al Pacific Skies, el mayor despliegue aéreo que protagoniza el Ejército del Aire y del Espacio en la últimas décadas.
El Pacific Skies se ha puesto en marcha. Lo ha hecho desde la basé aérea de Albacete. Desde allí han partido hacia Alemania seis Eurofigther (cuatro más dos reservas) de las alas 11 y 14, y un A400M del Ala 31, en lo que representa el primer salto de este despliegue aéreo único que recalará en ocho países diferentes. Este primer día del despliegue ha tenido como testigo a más de treinta medios de comunicación diferentes llegados de toda España, que han aterrizado en Albacete en un vuelo del Ala 35 fletado desde Madrid. La prensa destacada hasta este acto ha podido constatar de primera mano las dos premisas fundamentales que rodean a este histórico despliegue: proyectar y mantener una fuerza aérea a lo largo de 58 000 kilómetros.
Un homenaje de aviadores hacia aviadores. La denominación con la que ha sido bautizada la agrupación que protagonizará el mayor despliegue aéreo de la historia reciente del Ejército del Aire y del Espacio, el Pacífic Skies, es toda una declaración de intenciones. Plus Ultra, así se llamará este grupo que reunirá a 120 de nuestros militares en este ambicioso ejercicio que reúne a las fuerzas aéreas de Alemania, Francia y España en una autentica vuelta al mundo.
La iniciativa de esta denominación ha surgido de la máxima dirección del despliegue, el jefe del Mando Aéreo de Combate. El teniente general quiere poner en valor la dimensión de aquella gesta y evidenciar al mismo tiempo la importancia de un despliegue como éste, que, como en aquel vuelo casi centenario, transcurre casi en su totalidad surcando mares y océanos.
Será un despliegue también histórico que se merece un nombre histórico. Aquella epopeya inspira aún el espíritu de cualquier aviador actual. El Pacific Skies supone igualmente un desafío sin precedentes que pondrá aprueba las capacidades de proyección del Ejército del Aire y del Espacio.
Era otra época pero la voluntad y el esfuerzo de aquellos hombres que cruzaron el Atlántico es la misma que la que ahora protagonizan todos los efectivos que conforman el Pacific Skies. El Plus Ultra despegó el 22 de enero de 1926 de Palos de la Frontera (Huelva), la misma localidad de la que zarparon las tres naves del primer viaje de Colón el 3 de agosto de 1492. El avión hizo seis escalas en su travesía oceánica, apoyado por la Armada Española: Las Palmas de Gran Canaria (tras volar 1300 km), Praia (Cabo Verde, tras un vuelo de 1745 km. Allí desembarcó el teniente de navío Juan Manuel Durán, debido a la necesidad de aligerar el peso del avión), las islas de Fernando de Noronha (Brasil, tras una travesía de 2305 km, una distancia larguísima para un avión de aquella época), Pernambuco (Brasil, tras 540 km), Río de Janeiro (Brasil, tras un vuelo de 2100 km.) y Montevideo (Uruguay, tras volar 2060 km).
Por fin, el 10 de febrero de 1926 el Plus Ultra llegó a Buenos Aires, tras cubrir los 220 kilómetros que separaban a la capital uruguaya de la capital argentina. A orillas del Río de la Plata, donde amerizó el avión a las 12:27 hora local, los aviadores españoles recibieron un épico recibimiento siendo aclamados por miles de argentinos. Fue tal la expectación generada en Buenos Aires por la llegada del hidroavión español, que muchas calles de esa populosa ciudad quedaron atascadas por la afluencia de gente que acudía a verlo. El Plus Ultra había cubierto una distancia de 10 270 kilómetros durante 61 horas y 44 minutos de vuelo.
Fuente: Ejército del Aire
Fotografía: Elena Iribas.